jueves, 12 de septiembre de 2013

CEREBROS DE SILICON VALLEY ENVÍAN A SUS HIJOS A ESCUELAS SIN COMPUTADORAS

No hay televisores ni PC, solo tiza y pizarrón. Los niños aprenden a tejer, coser y hornear pan. Un establecimiento privado en el que recién se enseña informática a los 13 años. La Waldorf School de Península, California, es una de las escuelas privadas que eligen los “hiperconectados” empleados de Google, Apple y otras empresas de punta de punta de computación para que sus hijos se eduquen alejados de todo tipo de pantalla, según un informe del diario Le Monde sobre una nueva tendencia “Tech”: la desconexión . Tres cuartos de los alumnos inscritos en la Waldorf, son vástagos de personas que trabajan en el área de las nuevas tecnologías. “La gente se pregunta por qué profesionales de Silicon Valley, entre ellos algunos de Google, que parecen deberle mucho a la industria informática, envían a sus hijos a escuelas que no usan computadoras”, comentó Lisa Babinet, profesora de matemática y cofundadora de la escuela primaria en la conferencia anual Google Big Tent. El periódico francés recoge el testimonio de uno de estos padres: Pierre Laurent que eligió esta escuela porque cuestiona la tendencia actual en equipar en informática a las clases de una edad cada vez más temprana. “La computadora no es más que una herramienta. El que solo tiene un martillo piensa que todos los problemas son clavos”, dice, “Para aprender a escribir, es importante poder efectuar grandes gestos. Las matemáticas pasan por la visualización del espacio. La pantalla perturba el aprendizaje. Disminuye las experiencias físicas y emocionales”. En la Waldorf esa limitación no existe: se aprende a sumar y restar dibujando o saltando a la cuerda. Consultado si no le preocupa que sus hijos estén en desventaja en el uso de la PC, Laurent responde: “No sabemos como será el mundo dentro de 15 años, las herramientas habrán tenido tiempo de cambiar muchas veces. Por haber trabajado 12 años en Microsoft, sé hasta qué punto los softwares son preparados para ser del más fácil acceso posible.” También recuerda que todos los alumnos de la Waldorf tienen computadora en sus casas. La cuestión se reduce entonces a decidir cuando levantar las limitaciones de su uso. Richard Stellman, el gurú del software libre trabaja desconectado. “La mayor parte del tiempo no tengo Internet. Una o dos veces por día, a veces tres, me conecto para enviar y recibir mis correos. Releo todo antes de enviar” Así como por un lado muchas personas sufre “nomofobia”, es decir el miedo a no estar conectado, (Internet, teléfono, etc.), otros empiezan a dar la vuelta y a recuperar el placer de la desconexión. Fred Stuzman, investigador de la Carnegie Mellon University, desarrolló un programa llamado Freedom que bloquea el acceso a Internet durante 8 horas seguidas, obligando a reiniciar la computadora para reactivar el servicio. Deseoso de poder escribir sin distracciones, también diseño Anti-social que permite el acceso a Internet pero sin diversiones tales como Facebook o Twitter. “Las computadoras se han convertido en máquinas de distracción. Hay que equiparse hoy de funcionalidades que las devuelvan a su rol de máquinas de escribir”, dice, “es una forma de comprar tiempo”.